Fósforos por mayor
Los fósforos que se venden al por mayor son generalmente comercializados por distribuidores y mayoristas que se abocan al rubro de kioscos y comercios polirrubros, así como también a restaurantes y el rubro hotelero, y por lo general además de comercializar fósforos venden productos varios de consumo masivo y golosinas, cigarrillos, entre otros. Los fósforos por mayor son tanto elementos de utilidad para el hogar como elementos sumamente utilizados para formar partes de campañas de promoción y publicitarias, para lanzamiento de productos o divulgación de mensajes al publico masivo.
Los fósforos que se utilizan para campañas publicitarias, ya que son productos económicos que permiten la implementación de publicidades que contengan imágenes y diseños acordes a las expectativas del cliente. Por lo general las empresas que utilizan esto productos para promociones publicitarias pertenecen a los rubros tabacaleros, de bebidas o de indumentaria, hoteles, entre otros.
Muchas veces se ofrecen packs que contengan cajitas con diferentes imágenes graficas, lo que le permite a los clientes elegir varias imágenes distintas para la campaña publicitaria. Los productos deben estar confeccionados con materiales de primera calidad, ya que lo fósforos son instrumentos que manipulan fuego y por lo tanto pueden representar un riesgo para los usuarios si los materiales no son de buena calidad. Asimismo, es muy importante mantener estos utensilios fuera del alcance de los niños, ya que éstos por curiosidad pueden causar graves accidentes al manipularlos.
Para las cajillas publicitarias se utilizan cartulinas encapadas, por lo general de 250 grs, impresas en offset, también pueden llevar stamping oro o plata, y suelen llevar un acabado en barniz que le otorga un brillo suave. Cada cajilla es impresa individualmente, y los fósforos que lleva en su interior son por lo general fósforos de madera, de seguridad. Hay distintas clases de fósforos, particularmente existen 2 clases que son las mas utilizadas, los fósforos integrales (también llamados fósforos lucifer), que son los que encienden por fricción contra cualquier superficie rugosa. Contienen un compuesto de fósforo en la cabeza, de ahí su nombre. Esta clase de fósforos por mayor no se comercializan para la utilización con fines hogareños o publicitarios, ya que pueden resultar peligrosos ante la inadecuada manipulación.
Para estos fines se utilizan los llamados fósforos “de seguridad”, que sólo encienden al frotarlos contra su propio rascador, que es en realidad en donde se halla el fósforo. De esta manera se evita el riesgo de ignición espontánea a causa del frotamiento entre los propios fósforos dentro de su caja. Los fósforos de seguridad se han logrado confeccionar debido a la sustitución del fósforo blanco (que en su origen eran así todos los fósforos) por el fósforo rojo, y gracias a la separación de los ingredientes que contenían en su materia: la cabeza de la cerilla se compone de sulfuro de antimonio y clorato potásico, mientras que la superficie sobre la que se frota es de vidrio en polvo, cola y fósforo rojo.
Las superficies de raspado comúnmente están compuestas por sulfuro de fósforo, perclorato potásico, azufre y cola. Cuando el usuario frota la cabeza del fosforo con la superficie de raspado, que suele estar en la parte externa de la cajilla, a causa del calor que la fricción ocasiona, parte del fósforo rojo se convierte en fósforo blanco, y éste se prende. De esta forma se produce el comienzo de la combustión de la cerilla. Los vástagos que constituyen la parte tangible de los fósforos pueden ser de madera, papel o papel con cera, a los fósforos encerados se les ha acuñado originalmente el nombre de cerillas. En la actualidad los fósforos que se venden al por mayor suelen ser fósforos de seguridad de madera, en Argentina las marcan que comercializan estos productos para el consumo masivo generalmente hogareño, como para restaurantes y el rubro gastronómico en general, son las marcas 3 Patitos, Fragata y Ranchera.
Para el uso publicitario se utilizan fósforos que se fabrican con otras características, muchas veces en cuerpo de cartón y cabecilla de colores, de acuerdo a lo que se quiera lograr en relación al pedido del cliente. Algunas compañías que se dedican a la fabricación de fósforos los elaboran con un largo que duplica el largo de un fósforo convencional. Estos fósforos son llamados "extra grandes", y la ventaja que presentan es la de poder prolongar el tiempo que un fósforo puede permanecer encendido, y, al mismo tiempo, reducen el riesgo de sufrir quemaduras en las manos y dedos a causa de su manipulación prolongada, ya que, al ser muy largos, distancian los dedos del lugar donde se produce la combustión del fósforo en sí. Estos fósforos al por mayor resultan útiles para el encendido de calefones y termotanques, hornos, estufas, así como cualquier dispositivo cuyo foco de encendido se encuentre alejado del alcance de la mano, y se requiera de una varilla mas prolongada para llegar a encenderlo.